“El EXP10 Speed 6 es una visión de futuro de Bentley, un poderoso y exquisito Bentley a medida. El showcar tiene el potencial de ser la cúspide de los deportivos biplaza de lujo. Ofrece excitación, prestaciones para disfrute del conductor y lujo moderno con la firma de Bentley”. Así presentaba Wolfgang Dürheimer, presidente de Bentley, el bonito prototipo presentado en el Salón de Ginebra de 2015: el Bentley EXP10 Speed 6. Una propuesta con la que la compañía británica adelantaba su futuro en cuanto a diseño y dejando la puerta abierta a un posible modelo de producción.
Un coche que llamaba poderosamente la atención por su bonita estampa y que destacaba por el empleo de impresión 3D para elementos como las manetas, entrada de aire o las colas de escape. Pero no sólo eso, ya que durante todo este tiempo, no ha dejado de crear rumores a su alrededor sobre la posible llegada a producción tras algunas declaraciones del director de la marca, Dürheimer, que aseguraba que el concept reunía todas las características para convertirse en un biplaza de lujo. Además, por el camino, recibió el máximo galardón en el precio de diseño alemán (German Design Awards) por su imagen atemporal, el uso inteligente de nuevos materiales y una estática dinámica.
Para que este futuro biplaza con la “B alada” tuviera un final de producción, el Bentayga, el SUV que la firma lanzó apostando por el lujo extremo en una moda que parece imparable, debía tener un éxito palpable y como la fábrica de Crewe parece tener pedidos pendientes para una buena temporada, llega la hora de pensar en la llegada de este coupé. Se aprovecharía la inversión que la marca ha confirmado para los próximos tres años que asciende a 840 millones de euros y que abarca la completa renovación del Continental y un pequeño deportivo por debajo de este. Sería el plan de inversión más importante realizado jamás por la marca.
Al parecer, dicho deportivo ya está en proyecto tras recibir la luz verde para su producción, que estuvo luchando contra la posibilidad de lanzar un SUV por debajo del Bentayga, una idea que al menos por el momento ha sido descartada. Se dice que el deportivo tomará su base de partida del EXP10 Speed 6 y que su posible denominación será la de Bentley Barnato, nombre que lleva sonando bastante tiempo entre los medios, foros y redes sociales enfocadas al mundo del automóvil. Este nombre hace referencia al piloto tres veces campeón de las 24 Horas de Le Mans con Bentley en 1928, 1929 y 1930: Wolf Barnato.
Nuevamente ha sido el propio Dürheimer quien ha soltado la liebre sobre la llegada a producción del EXP10 o de un deportivo basado en el. Un hipotético deportivo biplaza que tendría como rival más claro al Aston Martin V8 Vantage. Y debemos dar gracias al Bentayga del que se planeaba vender 3.600 unidades y tras el cierre de noviembre se habían fabricado unos nada despreciables 5.500 ejemplares, saliendo por 241.484 euros el más barato. Un éxito que según ha comentado Dürheimer, les llevó a plantearse el desarrollo un SUV de tamaño medio empleando la plataforma del Audi Q5, un tema que terminó siendo detenido por el famoso “brexit”, ya que no saben cómo afectaría para recibir financiación de Volkswagen.
“No puedo decir que el Brexit haya puesto en riesgo nuestros proyectos, pero sí que lo han hecho más complicados. Sabemos que nuestra línea de producto se tiene que cercar hacia un cliente más dinámico y joven. El problema es que un SUV más pequeño rivalizaría directamente con los coches de otras muchas marcas premium, pero no de lujo. En cambio, si nos mantenemos en la línea actual de nuestros modelos si que estaríamos rivalizando en nuestro segmento de lujo, y eso es lo que preferimos”.
Javi Martín
