La diferencia entre un coche de calle y un prototipo de competición o Fórmula 1 viene a ser equiparable a la de un avión comercial y un caza de combate. Los primeros están pensados para transportar personas de la manera más cómoda, segura y eficiente posible, al contrario que los segundos, que tienen las máximas prestaciones para alcanzar el objetivo en el menor tiempo posible. No obstante, en los segundos es donde las marcas experimentan gran parte de sus innovaciones. Esas que luego, tarde o temprano, acaban llegando a los primeros. En nuestro caso, coches de calle, que es lo que usamos a diario. Ejemplos hay muchos: los frenos de disco, la fibra de carbono, los cambios con manos en el volante, materiales ultraligeros, aerodinámicas sofisticadas…porque las carreras son como laboratorios rodantes. Habitualmente pasan años para poder disfrutar de esas mejoras en los coches de calle. Pero hay excepciones. ¿En qué se parece el Toyota de Fernando Alonso al Prius, al Auris o al RAV4 de segunda mano que puedes encontrar en OcasionPlus? Sigue leyendo si quieres descubrirlo.
Y es que la marca japonesa no espera ese tiempo habitual para trasladar al coche de serie la mejor tecnología de competición. En el momento en que la ha tenido suficientemente probada y testada, la ha incluido en los Yaris Hybrid, Auris Hybrid, C-HR, Prius, Prius+ y RAV4 Hybrid, es decir, los modelos que comercializa con tecnología híbrida en España. En concreto, el Toyota de Fernando Alonso comparte con estos vehículos el sistema de propulsión híbrido, la gestión de la energía eléctrica, la frenada regenerativa y la aerodinámica.
Se trata de que, como ha afirmado Akio Toyoda, presidente y CEO de Toyota, la experiencia en el Campeonato Mundial de Resistencia conocido como WEC (World Endurance Championship), “permita fabricar vehículos cada vez mejores que puedan disfrutar desde ya los clientes de Toyota”. Aunque, como es lógico, las necesidades del Toyota de Fernando Alonso (TS050 Hybrid) que ganó las 24 horas de Le Mans y las de un modelo para circular por la calle son muy diferentes. Pero según el fabricante nipón, persiguen el mismo objetivo: obtener el máximo rendimiento energético. Eso se traduce en que los modelos de calle son eficientes, medioambientalmente sostenibles y de bajas emisiones, al margen de confortables.
Así las cosas, modelos como el Toyota C-HR o el Auris híbrido comparten con el Toyota de Fernando Alonso un motor de gasolina asociado a otro eléctrico, que se alimenta de la energía almacenada en una batería a través, entre otros mecanismos, de la que se obtiene por medio de las frenadas y las deceleraciones. Esto es un aspecto clave en el prototipo de competición y lo que permite al modelo de calle extender su circulación en modo cero emisiones por más tiempo. Además, ambos mundos comparten similitudes en aerodinámica (salvando las distancias de que en competición es absolutamente fundamental), así como en la reducción del peso total del vehículo, lo que permite mejorar el rendimiento y prestaciones, incrementar la eficiencia y mejorar la respuesta al volante.
Fuente: Toyota España